Durante su comparecencia en la Comisión de Transportes de la Asamblea de Madrid, Pradillo ha explicado que se pagará unos 3 euros por adquirirla que se podrán devolver en caso de que se deje de utilizar. También ha confirmado que se está "echando un pulso" con los bancos para que la red de distribución incluya también los cajeros automáticos.
"La tarjeta se comprará una única vez. ¿Por cuánto andará? Estará entorno a los tres euros, pero en todos los sitios donde está implantada uno ya deja de usarla, va y le reembolsan el dinero. Es como si fuera el casco de antes de las bebidas", ha puesto como ejemplo.
El gerente del Consorcio ha indicado que ya están instaladas todas las canceladoras en la 'corona A', lo que permitirá la implantación el próximo año en esa zona, excepto para el abono de la tercera edad, pues este no sólo es válido en la capital sino también en el resto de la región. "En 2013, se extenderá en bloque al abono de la tercera edad y al normal en toda la región. De este modo, a finales de ese año, estará todo (el sistema de transportes funcionando) con la tarjeta sin contacto", ha dicho.
Además, la tarjeta permitirá saber los orígenes y los destinos de las personas que usan el transporte público madrileño, algo que hasta ahora sólo se podía hacer a través de la realización de diferentes encuestas. Pradillo ha explicado que este sistema será "más barato en la adquisición, más barato en su mantenimiento, más fiable y más difícil de falsificar" y ha confirmado que todavía se está estudiando si se mantiene el actual sistema de venta para un mes o si se implanta el de 30 días naturales desde la adquisición del abono, como han demandado algunos usuarios.
