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El PP propone flexibilizar el veto a los autocares turísticos en las inmediaciones de la Sagrada Familia

Alberto Fernández, líder popular en el Ayuntamiento de Barcelona, cree que la prohibición generará pérdidas

jueves 26 de abril de 2012, 01:00h

El líder del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, ha propuesto flexibilizar el veto a los autocares turísticos que el consistorio quiere aplicar desde junio alrededor de la basílica de la Sagrada Familia.

Según ha informado Europa Press, Fernández Díaz ha respondido así en rueda de prensa al preguntársele sobre la reciente campaña de operadores turísticos contra la prohibición, que augura que generará pérdidas millonarias para el sector y la ciudad.

El PP propone flexibilizar el veto y permitir que los autocares procedentes de cruceros y de turistas con poco tiempo para visitar la ciudad puedan aparcar al lado de la basílica, y apuesta por prohibir en este lugar a los que dispongan de más tiempo para hacer turismo. Ha dicho que para compatibilizar la tranquilidad de los vecinos y el turismo hay que tener en cuenta que "no todos los autocares son iguales" y priorizar los que estén poco tiempo en la ciudad, como son los de los cruceros, que deben poder aparcar al lado del templo.

En otra rueda de prensa, Ricard Gomà (ICV-EUiA) ha rechazado las reivindicaciones del sector turístico, y ha defendido que Barcelona debe estar "al servicio" de los vecinos y no de los operadores privados. También lo ha rechazado en rueda de prensa el líder de UpB, Jordi Portabella (ERC), que ha dicho que la prioridad de la ciudad debe ser "atender a la ciudadanía", y ha reivindicado su propuesta alternativa de construir un aparcamiento para autocares.

Peaje centro

Fernández Díaz se ha mostrado contrario a la propuesta de la Coordinadora Metropolitana del Taxi (CMT) de establecer un peaje de acceso al centro de la ciudad en vehículo privado, y cree que la solución para descongestionar las calles de coches pasa por mejorar el transporte público.

Gomà ha dicho que su propuesta para reducir el tráfico en la ciudad pasa por crear supermanzanas peatonales y garantizar por ley la financiación del transporte público y Portabella ha evitado referirse a la iniciativa del taxi hasta conocerla con detalle.