www.nexotrans.com

El volumen de negocio de ZF crece un 20% en 2011, alcanzando los 15.500 millones de euros

El fabricante de componentes alemán ha creado 4.500 puestos nuevos, de los cuales 2.000 en Alemania

viernes 04 de mayo de 2012, 01:00h

ZF Friedrichshafen AG ha terminado el año fiscal 2011 con un nuevo récord de volumen de ventas de 15.500 millones de euros. Los resultados operativos ha crecido un 25%, alcanzando 850 millones de euros (680 millones en 2010). La plantilla ha crecido en unas 7.000 personas hasta alcanzar los 71.500 empleados.

Este es el balance presentado por Hans-Georg Härter, presidente ejecutivo que acaba de  entregar su puesto a su sucesor Stefan Sommer el primero de mayo. "En el año en curso ZF calcula un nuevo crecimiento de su volumen de negocio hacia los 17.000 millones de euros y un crecimiento de la plantilla hasta los 76.000", ha dicho Sommer. Las inversiones previstas también se sitúan a un nivel récord, al alcanzar los 1.500 millones de euros a invertir en la ampliación de las plantas y en nuevos productos.

"Después del crecimiento del 38% en 2010, también en 2011 ZF ha progresado muy por encima de la media del sector, con un plus del 20%", ha dicho Hans-Georg Härter en su última conferencia de prensa referente a las cifras de negocio, celebrada en Stuttgart, Alemania. "Pudimos reforzar nuestra posición internacional sobre todo con nuevos clientes y en el aumento de nuestra posición en el mercado". El mayor crecimiento lo consiguió ZF en los Estados Unidos, tras años de consolidación, seguido por Europa, América del Sur y Asia. En todos los grandes sectores de mercado el negocio de ZF se desarrollaba de manera muy positivo, sobre todo en las divisiones de maquinaria de obra, vehículos industriales y automóviles especialmente de la categoría Premium.

"Hemos conseguido una importante diversificación en uno de nuestros principales negocios que es la producción de cajas de cambios y engranajes, reforzando de esta manera nuestra división técnica industrial".

Entre esta inversiones están la nueva planta en Greenville/South California, donde a partir de la primavera de 2013 se producirán las cajas de cambios automáticas de ocho —y poco después también la caja de nueve marchas— para el mercado norteamericano. También se ha invertido en un nuevo centro de logística de ZF Services en Bremen (Alemania). "Estas grandes inversiones son la base del crecimiento del consorcio, pero han reducido nuestra liquidez bruta desde los 2.000 millones de euros hacía los 1.700", calcula Konstantin Sauer, director ejecutivo financiero de ZF. "A pesar de ello pudimos pagar la adquisición de la planta de multiplicadoras para aerogeneradores y otras elevadas inversiones principalmente con nuestro propio dinero, al mismo tiempo que pudimos mantener nuestra cuota de capital propio al nivel del año anterior". Esta cuota sólo ha bajado un punto porcentual hacía el 37%.

Un fuerte crecimiento se registró también en la plantilla mundial de ZF: en 2011 el consorcio ha contratado a casi 7.000 personas, de las cuales 3.000 en Alemania. Esta cifra incluye los casi 2.650 empleados resultantes de las tomas de posesión de empresas. También este año ZF aumentará su plantilla calculando con 4.500 nuevos puestos de trabajo, de las cuales 2.000 serán en Alemania. Según los planes del consorcio la plantilla alcanzará los 76.000 empleados a finales de 2012. "Nuestros empleados calificados y muy motivados son nuestro mejor capital", ha dicho Stefan Sommer.

Inversiones futuras

Las tecnologías del futuro como la nueva caja de cambios automática de nuevo marchas, los nuevos componentes de materiales ligeros y las nuevas tracciones híbridas y eléctricas precisan el conocimiento tecnológico de la plantilla. "Una buena plantilla y las nuevas tecnologías son principales para el éxito de ZF, pero precisan una estrategia de inversiones muy ambiciosa", explica Sommer.

ZF invertirá en 2012 unos 1.500 millones de euros en nuevas plantas en todo el mundo y en nuevos productos, una cifra que alcanzará los 5.000 millones de euros hasta 2015. "Son inversiones muy elevadas, a las que solo nos podemos enfrentar con un fuerte control de nuestros costes y una enorme disciplina en los gastos", ha dicho Sommer. "Pero no hay otra alternativa: hemos trabajado fuerte para adquirir grandes pedidos, que nos obliga a una gran fidelidad hacia nuestros clientes".