Aspectos como el acondicionamiento de la mercancía, el peso del vehículo, el estado de los neumáticos o los tiempos de conducción centrarán las inspecciones realizadas a lo largo de toda esta semana en las carreteras vascas, ya que el objetivo de esta campaña de control es prevenir la siniestralidad de este tipo de vehículos dedicados al transporte pesado.
Los conductores serán sometidos a pruebas preventivas de alcoholemia. Las autoridades aseguran que en el caso de que tengan que adoptar la medida de inmovilización por incumplimiento grave de alguna norma, los agentes buscarán el lugar cercano más adecuado y que cuente con un mínimo de servicios para el conductor.
Durante la campaña realizada en el mes de marzo del pasado año, las Unidades de Tráfico de la Ertzaintza revisaron más de 1.300 vehículos, en un total de 96 dispositivos realizados en el conjunto de la red viaria vasca. Como consecuencia de las inspecciones llevadas a cabo, 209 transportistas fueron sancionados. En concreto, se efectuaron 24 controles en Gipuzkoa a 366 vehículos, que concluyeron con 81 denuncias. En Vizcaya, se llevaron a cabo 31 controles a 504 vehículos, en los que se tramitaron 80 denuncias. En las carreteras alavesas se realizaron 41 controles a 458 vehículos, con un total de 48 sanciones.
