La compañía logística DHL ha transportado tres rinocerontes negros en grave peligro de extinción —como parte de una iniciativa de conservación de la Fundación Aspinall— desde el aeropuerto de Manston, en Kent, Reino Unido, hasta el Parque Nacional del Kilimanjaro, en Tanzania. El traslado de los rinocerontes, que nacieron en cautividad en el Parque de Animales Salvajes de Port Lympne, forma parte de una iniciativa para reforzar la reintroducción de rinocerontes negros del este en el Santuario Mkomazi Rhino, de Tanzania, con el apoyo de Tusk Trust, una organización para la conservación. Los rinocerontes negros se han reducido significativamente debido a la extensa caza furtiva.
La especial carga a transportar por DHL consistió en un rinoceronte macho, Monduli y dos hembras, Grumeti y Zawadi, que ahora viven en libertad por primera vez.
Los rinocerontes se transportaron en un Boeing 757, modificado específicamente para asegurar su comodidad y seguridad a bordo. El avión también dispuso de características de seguridad mejoradas, como dispositivos de salvamento y control de temperatura, para acomodar a estos singulares pasajeros. Además, se habilitó espacio a bordo para dos ingenieros aeronáuticos, dos cuidadores de los rinocerontes en Port Lympne, dos expertos en carga de aviones y un veterinario especialista.
Las modificaciones sirvieron no sólo para acomodar a los animales sino también a sus provisiones, entre ellas cuatro fardos de heno de alfalfa, medio cubo de zanahorias, medio de manzanas, una caja de plátanos, una de apio, una de espinacas y tres bidones de agua.
Tras la exitosa liberación de los rinocerontes, la Fundación Aspinall está ultimando ahora los planes para la liberación de otros animales en peligro de extinción en una de las reintroducciones en la vida salvaje más ambiciosas y de mayor alcance. La campaña “De vuelta a la Libertad” de la Fundación, también prevé liberar a ocho langures de Java y cinco gibones de Java (ambas especies de primates) y a dos elefantes machos africanos en espacios naturales protegidos. Este evento único e histórico en la cría de animales es posible gracias al éxito de los programas de cría en Howletts y Port Lympne y a los programas de protección de vida salvaje en todo el mundo."
