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El Grupo de Transportes de Turín utiliza minibuses eléctricos en la ciudad que se cargan en siete minutos

Cada línea es de siete kilómetros y los autobuses se recargan con un proceso de carga rápida inductiva

lunes 19 de noviembre de 2012, 01:00h

La empresa de transporte público de Turín, Gruppo Torinese Trasporti (GTT), ha adoptado una política de transporte sostenible y ahora utiliza 23 autobuses eléctricos con carga inductiva para el transporte interior de la ciudad. Se tarda sólo siete minutos para recargar a una capacidad del 80%.

El GTT ha apostado por la movilidad sostenible. Así, cuenta con 23 autobuses eléctricos que hacen rutas en el centro de la ciudad de Turín. Tienen 7,48 metros de largo, 37 asientos de pasajeros (15 sentados y 22 de pie). Los buses puede alcanzar una velocidad máxima de 70 kilómetros por hora, y su capacidad de conducción es tan cómoda como un bus tradicional, pero con menos ruido, explica la compañía, destacando que su consumo de energía es de 95 kWh/100km.

En el centro de Turín hay dos líneas de autobuses operando desde 2010 sobre Transferencia de Energía Inductiva (IPT, por sus siglas en inglés). Cada línea tiene una longitud de unos siete kilómetros y los autobuses se recargan en el terminal con un proceso de carga rápida inductiva. Se tarda sólo siete minutos para recargar a una capacidad del 80%.

El sistema funciona con acoplamientos magnéticos de resonancia. Consta de dos componentes principales: una bobina primaria conectada vía Track Supplies con suministros de red eléctrica, y una bobina de recogida, que está integrada en la parte de abajo del vehículo. La tecnología proporciona una transferencia sin contacto y automatizada.

Otros detalles técnicos que cabe destacar es el consumo de energía de 1.25kW/km con baterías de plomo ácido en gel, cuyo cambio se hace cada 4,5 años y un 10% de regeneración de energía (energía de frenado). La compra de un autobús IPT supone casi el doble de los costes de un bus diesel normal, en torno a los 420.000 euros, además de una estación de carga (70.000 euros) y un rectificador de carga (10.000 euros). Sus ventajas se resumen en que las emisiones son un 20% menores así como los gastos de mantenimiento y tiene un 20% más de vida útil comparando con un bus diesel normal. “Se supone que, en general, los costes de ciclo de vida son casi iguales, pero existe un efecto positivo ambiental adicional”, señala el GTT.

Sobre la empresa

Gruppo Torinese Trasporti (GTT) es una empresa privada de transporte de la ciudad de Turín. Sus actividades se centran en el transporte público local y la movilidad. En 2005 la empresa transportó a 640.000 clientes cada día, empleó a 5.500 personas (incluidos 2.900 conductores) y tuvo una facturación de 403 millones de euros.

La flota GTT comprende 1.180 autobuses que cubren las áreas urbana y no urbana con autobuses y líneas de tranvía. Cada año, la flota recorre 56 millones de kilómetros. La misión de la compañía es ser una empresa líder en el sector de la movilidad, ofreciendo calidad en unos servicios y costes competitivos. Asimismo, desarrolla una política ambiental de respeto por el medio ambiente a través del desarrollo sostenible en Turín.