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SemuraBus incorpora dos autobuses Mercedes a su flota de Zamora superando la renovación de la mitad de sus vehículos

jueves 23 de mayo de 2013, 01:00h
La flota al completo deberá ser renovada antes del 31 de Agosto de este año.
La flota al completo deberá ser renovada antes del 31 de Agosto de este año.

Este miércoles han entrado en servicio dos nuevos autobuses urbanos que son además los dos primeros de mayor capacidad en la ciudad, de la marca Mercedes Benz, dotados con piso bajo basculante y rampa automática para minusválidos, que sustituyen a otros seminuevos que está utilizando la empresa concesionaria hasta que se complete la renovación total de la flota.

Esta incorporación supone un paso más en la mejora del servicio de autobuses urbanos, según manifestó el portavoz municipal, Francisco Javier González, con una renovación total que debe concluir antes del 31 de Agosto, fecha en la que se cumplirá el plazo de seis meses de que dispone SemuraBus para la implantación del nuevo servicio, de acuerdo con el contrato de concesión.

Junto con la incorporación de los nuevos vehículos la empresa concesionaria está trabajando activamente en la renovación de las paradas actuales y la instalación nuevas marquesinas. "En estos momentos se están instalando veinte nuevas marquesinas, la mitad de las cuales contarán con un sistema de información en pantalla sobre el tiempo de llegada del autobús", según informó el portavoz municipal. "Así, cuando concluya la renovación se contará en toda la ciudad con unas cincuenta marquesinas y solo aquellas paradas en las que se registra una menor espera de viajeros no contarán con espacio cubierto, aunque también se renovarán los postes informativos sobre itinerarios en las paradas", concretan desde el Ayuntamiento.

Según Francisco Javier González estas mejoras "están contribuyendo a una mayor fidelización en el servicio por parte de los usuarios, de tal forma que se está reduciendo la utilización del billete ordinario a favor de la tarjeta monedero, que alcanza ya un total del 80% de los usuarios y que supone en la práctica una reducción a 63 céntimos del coste del viaje, frente a los 90 céntimos del billete sencillo".