El mayor cambio es la introducción de tres motores diesel Euro 6 completamente nuevos, de cinco, ocho y 11 litros, con potencia de entre 240 y 460 CV y que sustituirán a los motores actuales en Europa. El paso de Euro 5 a Euro 6 implica que las emisiones de óxido nitroso se reducirán en un 87% y las partículas de los gases de escape se reducirán a la mitad. Al mismo tiempo, el consumo de combustible y el impacto climático de los autobuses se reducirá gracias a las novedades técnicas del motor y al menor peso del motor y del chasis.
"Los motores se han diseñado para alcanzar el mínimo consumo de combustible posible así como los bajísimos niveles de emisión requeridos para Euro 6", afirma Nils Nilsson, Euro 6 program manager en Volvo Buses.
Híbrido enchufable
Volvo Buses refuerza su gama con un nuevo autobús articulado con tecnología híbrida. El Volvo 7900 híbrido articulado tiene capacidad para 154 pasajeros y ahorra hasta un 30% más de combustible que el actual modelo diésel.
El nuevo autobús articulado tiene capacidad para hasta 154 viajeros, cuatro más que la versión diésel y más que cualquier otro autobús híbrido del mercado. En comparación con el Volvo 7900 de doble eje, el consumo de combustible se reduce en un 15% por pasajero en un autobús lleno.
A partir de 2014, todos los autobuses Volvo de piso bajo será híbridos, según el programa híbrido de Volvo, que incluye tanto el Volvo 7900 híbrido (4x2) como el Volvo 7900 hibrido articulado y el Volvo B5LH de dos pisos, y se espera la llegada del urbano 100% eléctrico para 2017.
Oscar Martinera, director comercial de Volvo Buses para España, afirmó en la presentación a los clientes nacionales que "proponemos una eficiencia verde, de la que salgan beneficiados tanto los operadores de transporte como las ciudades. Soluciones como el I-Coaching o la telemática ya son una realidad, y no podemos olvidar que circulan más de 1.000 híbridos urbanos de Volvo por ciudades de 21 países".
Además, Martirena recordó el paso adelante que supone el híbrido enchufable, ya en pruebas en Gotemburgo, que eleva el ahorro del combustible hasta un 80%.
