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Tras la falta de acuerdo en la colocación de mamparas, el Ayuntamiento de Bilbao opta por la videovigilancia

lunes 14 de abril de 2008, 01:00h

El 60% de los ‘bilbobuses’ (cerca de 70 vehículos) incorporarán este año cuatro cámaras de seguridad en su interior, al no haber acuerdo en la colocación de mamparas para proteger a los conductores de los autobuses bilbaínos, según fuentes del Ayuntamiento y de TCSA, la compañía que gestiona el servicio de autobuses de la villa. La decisión ha sido tomada pese a que los trabajadores, en plena negociación del convenio colectivo, consideran que las grabaciones son algo "insuficiente" y plantean por primera vez la contratación de guardas de seguridad privada para los servicios nocturnos, o ‘gautxoris’, y las líneas más conflictivas.

A petición de los propios conductores, el Consistorio y TCSA decidieron hace un par de años probar un modelo de mamparas en ocho autobuses que fueron rotando de línea (cuatro en Bilbobus y cuatro en Bizkaibus), pero los resultados obtenidos no fueron satisfactorios: Los conductores consideraban que ese tipo de mampara producía ruidos y reflejos que molestaban a la vista y, por consiguiente, a la conducción.

Instalar el sistema de grabación -en pruebas desde hace un mes en dos autobuses- supondrá una inversión de entre 2.500 y 5.000 euros por autobús. La idea es colocar cuatro cámaras por cada coche de doce metros, explicó el director de TCSA. Desde Circulación se ha abierto ahora el periodo de licitación del concurso dirigido a la adquisición de las unidades, al que optan cuatro empresas.