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La federación ATA reivindica para los trabajadores autonómos que coticen por formarse

sábado 07 de marzo de 2015, 01:00h

ATA pide que los trabajadores por cuenta propia coticen por formación al igual que hacen los trabajadores por cuenta ajena. Esta cotización será del 0,1 % sobre las bases de cotización en aquellos autónomos sin asalariados a su cargo y del 0,7% sobre las bases de cotización para aquellos por cuenta propia que tengan asalariados contratados. Esta medida supondrá un coste aproximado de 10 euros al año en el primer caso y de 65 euros anuales para los autónomos con asalariados.

Con esta cotización serán más de 300.000 los trabajadores autónomos, incluyendo la formación de demanda, los que podrán formarse anualmente frente a los poco más de 5.000 autónomos que lo hacen con el régimen actual. Desde ATA creen que el esfuerzo está perfectamente justificado, ya que solo la subida de 1% sobre la base mínima de cotización que se ha producido en 2015 significa para el 87% del colectivo un incremento de 90 euros de media por autónomo.

Por otro lado, ATA manifiesta su total acuerdo con la reforma del modelo de formación que está abordando el Gobierno, basado en la concurrencia competitiva, donde el papel en la gestión e impartición de las acciones formativas se ciñe únicamente a los centros y entidades de formación sin la participación de patronal, sindicatos, organizaciones de autónomos y economía social. Así, se refuerza la transparencia del uso de los recursos públicos y una mayor eficacia que adecúe la formación de los trabajadores a sus necesidades. Un sistema que ha de estar sostenido por los fondos provenientes de las cuotas de formación que han de aportar trabajadores y empresas.

Por último, tal y como se recoge en la reforma laboral, ATA ha solicitado que se cumpla lo estipulado por la reforma y las organizaciones de autónomos participen en el diseño y planificación de la formación destinada a los autónomos atendiendo a las singularidades del colectivo.

Según José Luis Perea, director de formación y PRL de ATA, "la formación de los trabajadores autónomos tiene que dejar de ser una limosna para convertirse en un derecho fundamental, tal y como recoge el Estatuto del Trabajo Autónomo, asimilándonos con la cotización a las mismas oportunidades de mejora de la competitividad que tienen los asalariados".