La Comisión pone ejemplos de proyectos que ha financiado, como ZeEUS o Civitas
Reconociendo que el
Libro Blanco de Transportes pide que se haga un mayor uso del transporte público y establece un objetivo de reducir a la mitad el número de vehículos de propulsión convencional en las ciudades para 2050 (algo donde el transporte público puede ayudar), la Comisión Europea ha respondido señalando que las medidas más eficaces las tomarán las autoridades regionales y locales como parte del respeto al principio de subsidiariedad.
La Comisión tampoco está de brazos cruzados
También ha justificado que promueve el desarrollo de tecnologías aplicadas al transporte público a través de proyectos de investigación y demostración, donde los campos más importantes son la eficiencia energética de los vehículos, la infraestructura para carburantes alternativos o la movilidad sostenible.
Así, la Comisión pone ejemplos de proyectos que ha financiado como ZeEUS para evaluar la viabilidad de los autobuses eléctricos o EBSF2 sobre autobuses eléctricos. De igual modo ha defendido que promueve el transporte público a través del programa Civitas (donde el transporte colectivo de viajeros es una de las ocho prioridades), ha ofrecido orientaciones el paquete de movilidad urbana de 2013 y ha pedido condiciones de mercado apropiadas para carburantes alternativos y que se promoviera más la contratación pública verde de vehículos y flotas ecológicas para el transporte público mediante la comunicación de la Unión de la Energía.
