El billete ha subido una media de veinte céntimos por cada 10 kilómetros, pero las empresas de autobuses de Toledo creen que se trata de una cuantía "insuficiente", si se confronta con el abultado precio del gasóleo.
Según declaraciones recogidas por el diario La Tribuna, José Luis García Monge, presidente de la asociación de la provincia de Toledo, asegura que los transportistas se toman esta subida "como una especie de adelanto de la próxima revisión". Monge considera que "aunque el aumentar ingresos siempre es algo bueno, lo cierto es que frente a la subida que ha tenido el gasóleo (33%), el incremento de las tarifas no es nada". El máximo representante de la asociación toledana sí quiso dejar claro que "no es que el Sector piense que tengan que subir más los precios de los billetes, pero desde luego sí se cree que no se equipara a las consecuencias que ha producido el incremento del precio del combustible".
La subida de las tarifas afecta a todas las empresas de Toledo que se dediquen a servicios regulares. La nueva Orden tiene por objeto que las personas dedicadas a esta actividad puedan hacer frente al incremento de los costes de explotación que han sufrido como consecuencia del incremento por encima de lo previsto del precio del gasóleo. El Ministerio de Fomento pretende que se cubran la totalidad de los costes reales y se fomente la inversión, seguridad y calidad de este tipo de servicios.
