Este cambio de piel responde a la necesidad de adaptar las estrategias y la personalidad a los nuevos desafíos manteniendo inalterable el carácter internacional, el respeto a las personas y a sus necesidades y el servicio cercano a los clientes como señas de identidad.
Del logotipo desaparece el tradicional color rojo pero se potencia el azul que ya tenía presencia en la marca para dar fuerza a los valores de la tecnología, la seguridad y la serenidad que están asociados a este color. La nueva imagen transmite confianza a los clientes y colaboradores, a quienes se lleva acompañando durante 50 años en sus necesidades. El nuevo concepto corporativo está diseñado para transmitir el espíritu que marca nuestro quehacer diario de fabricar productos que hagan más fácil el día a día de las personas, el valor más importante para la empresa.
50 años de creaciones
La nueva imagen concentra el esfuerzo que acometen diariamente las 300 personas que componen la plantilla de Masats para hacer posibles y placenteras las necesidades de accesibilidad de los clientes, que tienen a su servicio la más moderna tecnología en puertas neumáticas y eléctricas, rampas y plataformas de acceso a vehículos. Son 50 años creando sistemas de accesibilidad para facilitar la vida de las personas.
Masats ha apostado al margen de la renovación de su marca por modernizar los sistemas de homologación de productos y por crear más valor añadido
La renovada imagen es fruto de una reflexión llevada a cabo para responder a los profundos cambios que se están produciendo en el sector y que exigen establecer dónde se quiere estar dentro de unos años, a qué tipo de clientes se pretende llegar y cómo responder a sus necesidades. Con el convencimiento de que el futuro pasa por elaborar productos más tecnológicos y más probados y fiables, Masats ha apostado al margen de la renovación de su marca por modernizar los sistemas de homologación de productos y por crear más valor añadido, ofreciendo el máximo rigor y profesionalidad en los proyectos para generar productos de calidad adaptados a las necesidades de carroceros, operadores y usuarios.
Masats se fundó hace medio siglo con dedicación exclusiva al transporte de viajeros y hoy tiene depositadas grandes expectativas en el ámbito del ferrocarril gracias a la decisión estratégica adoptada hace nueve años de desarrollar una gama de producto específica para este sector y que se refuerza con la decidida e ilusionante apuesta actual en el desarrollo de las puertas de andén. El esfuerzo, la dedicación y la permanente evolución e innovación le han convertido en una empresa de referencia en el sector de los equipos para carretera y ferrocarril.
Proveedora de carroceros y de grandes marcas a nivel mundial, la empresa exporta el 47% de su producción a más de 30 países, con una fuerte presencia en Singapur y con una importante entrada en los mercados de Hong-Kong y Kuala Lumpur. Además del creciente peso en Asia, cada vez es más significativa la implantación en Estados Unidos con la puesta en marcha de una planta en Atlanta que refuerza la apuesta estratégica por el mercado norteamericano. Esta mayor proyección mundial de la mano de productos de elevada cualificación tecnológica hace que la marca Masats sea reconocida a nivel internacional.
La nueva imagen corporativa viene ahora a reforzar un modelo basado en las personas, la internacionalización, los equipos de mejora y la innovación continua, valores que hacen que el proyecto Masats esté más vivo y con más proyección con el paso de los años. Para seguir siendo garantía de futuro para clientes y colaboradores, la empresa continúa redefiniendo su organización interna y sus retos para asegurar un crecimiento sostenido con la mirada puesta a largo plazo. Todo para diseñar una estructura más cercana a los clientes y que sepa interpretar las necesidades que tengan en cada momento los carroceros, las grandes marcas, los constructores, las entidades y los operadores del transporte público.
Fundada en 1967 por el Salvador Alapont, Masats celebra sus primeros 50 años de vida con el orgullo de haber forjado un modelo propio y una personalidad muy definida que se sustenta en la responsabilidad adquirida a largo plazo por todas las personas que componen la empresa, la formación continua, el reconocimiento del trabajo realizado y la apuesta valiente por continuar fortaleciendo aún más el compromiso de futuro con el proyecto. Estos rasgos son reconocidos por los clientes, que son quienes han motivado un cambio de imagen que proyecta el humanismo de la empresa y el compromiso con las personas.
