La Federación de Empresas de Transporte de Mercancías por Carretera de Castilla y León (Fetracal) apoya de esta manera el paro patronal convocado por el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC) y avalado por las organizaciones empresariales a las que pertenece Fetracal, como CETM y Conetrans.
'Nos han obligado a realizar las labores de carga y descarga cuando no disponíamos de ningún tipo de protección'
A través de un comunicado, la Federación transmite "el descontento de los transportistas de mercancías de Castilla y León con el trato recibido por el Gobierno durante los últimos años, en los que ni el ministro del ramo ha tenido una interlocución clara con el sector ni se han atendido las reivindicaciones que se consideran lógicas para resolver problemas estructurales". Aunque Fetracal reconoce avances en las últimas semanas en las conversaciones con el Ministerio de Transporte, en la actualidad "sigue sin producirse un respaldo concreto, y evidente, hacia el sector del transporte", añade.
Al mismo tiempo, la patronal del transporte de mercancías por carretera de Castilla y León también es consciente de que, "durante el estado de alarma, decretado para afrontar la pandemia, las instituciones se han acordado del transporte para trabajar, obviando tanto la ayuda institucional que necesitan las empresas del sector como su apoyo para garantizar unas condiciones de trabajo seguras para los conductores. Es más, el Gobierno anunció, dentro de su plan de apoyo al sector de la automoción, la aprobación de las 44 toneladas y los 4.5 de altura en mayo de 2021 en contra de lo defendido siempre por el sector y sin recabar su opinión"
Además, ha querido mostrar su descontento con un segmento muy importante de cargadores, ya que en su opinión, durante el estado de alarma han maltratado a los conductores de camiones en numerosos centros de carga y descarga de las mercancías, "donde se les ha negado hasta la posibilidad de acceder a los aseos y servicios más básicos", asegura Fetracal. "Nos han obligado a realizar las labores de carga y descarga cuando no disponíamos de ningún tipo de protección con el consiguiente riesgo de contagio, obviando además la normativa en prevención de riesgoslaborales. Y ha aumentado, indiscriminadamente, los tiempos de espera entre cargas y se negaron a compensarnos económicamente por la falta de viajes de retorno”, denuncian desde la Federación.
