Continental ha logrado un paso clave en su hoja de ruta hacia una movilidad más responsable. Todas sus plantas europeas de producción de neumáticos han recibido la certificación ISCC PLUS, que reconoce el uso de materias primas renovables y recicladas de forma trazable y documentada. Esta certificación, de carácter internacional, refuerza el compromiso de la compañía por reducir el impacto ambiental de sus procesos y avanzar hacia una cadena de suministro transparente y sostenible.
La certificación incluye instalaciones ubicadas en Alemania, Francia, Portugal, Eslovaquia, Rumanía y la República Checa, así como su planta textil en Lousado, que suministra refuerzos para neumáticos. Además, la planta de Continental en Hefei (China) también ha obtenido este reconocimiento, ampliando así su alcance global.
Hacia una producción más limpia y eficiente
El enfoque ISCC PLUS se basa en un sistema de balance de masa, que permite combinar y rastrear materiales fósiles, renovables y reciclados en el proceso productivo. Esta metodología garantiza que Continental pueda incrementar de forma controlada y medible el uso de componentes sostenibles, como caucho sintético de origen biológico y negro de humo generado con procesos circulares.
“Esta certificación es una señal potente para el sector y demuestra que la transformación hacia una industria del neumático más verde es posible”, asegura Jorge Almeida, director de Sostenibilidad de Continental Tires. “Nuestro objetivo es extender este reconocimiento a más regiones y alcanzar, en 2030, un 40 % de materiales renovables y reciclados en nuestros productos”.
Un camino global hacia la trazabilidad y la eficiencia
El sistema ISCC (International Sustainability and Carbon Certification), creado en 2010, se ha convertido en uno de los estándares más exigentes para certificar cadenas de suministro responsables. Abarca desde biomasa agrícola hasta residuos industriales y materiales reciclados, siendo reconocido a nivel mundial.
Con más de 150 años de historia y una fuerte presencia global, Continental mantiene firme su visión: liderar la transformación de la movilidad, combinando innovación, seguridad y sostenibilidad. En 2024, la compañía generó ventas por 13.900 millones de euros en su división de neumáticos, que emplea a más de 57.000 personas y cuenta con 36 centros de producción e innovación en todo el mundo.