La idea final es incrementar en diez puntos el uso del tranvía y del autobús urbano, de forma que para 2025 su utilización alcance el 17,3%.
Por otra parte, también para 2025, se quiere reducir del 36,6 al 26,1% el uso del vehículo privado e incrementar los desplazamientos a pie del 49,9 al 59,6%. Cabe recordar que Vitoria tiene el mayor índice de motorización de las ciudades de su entorno, con 433 vehículos por cada mil habitantes. Este elevado uso del coche explica que el transporte absorba el 36% de la energía que se consume y que, de este gasto, el 94,5% se lo lleve la carretera. Según explicó José Félix Basozabal, coordinador del Foro de Gestión de la Demanda de Movilidad, esto se traduce en unos costes externos que sólo en Euskadi rondan los 2.000 millones de euros.
Todos estos datos han sido ofrecidos en una jornada informativa celebrada en el parque tecnológico de Miñano, pensada para promocionar alternativas al vehículo privado y proponer nuevas medidas de movilidad.