De esta manera, se sustituyen autobuses que ya han cumplido su vida útil. El Ayuntamiento de Viladecans valora positivamente la mejora del servicio, que responde a una demanda del propio municipio, ya que el 60% de la ciudadanía tiene que desplazarse fuera del municipio para trabajar y 10,5 millones de personas utilizan el transporte público anualmente.
El próximo otoño también se incorporarán tres autobuses híbridos, que emiten un 30% menos de CO2. La renovación de la flota supone una inversión en Viladecans de 4,6 millones de euros, 23,4 en toda el área metropolitana.