El primer autobús de Alsa en el que se ha instalado es un Volvo B9R con 55 plazas, con carrocería Sunsundegui Sideral, destinado a los servicios regionales de Media Distancia operados por la compañía, que se puede visitar en la FIAA. Esta unidad es la primera en Europa que esta equipada con el sistema desarrollado por Fainsa en su totalidad, esto es, que cada butaca –además del nuevo cinturón- esta equipada con un sensor de plaza que detecta si el viajero se ha abrochado o no el cinturón y, en el caso de que no lo haya hecho, una luz encendida le recuerda la obligatoriedad de hacerlo.
El nuevo sistema de seguridad presentado en la FIAA, supone la introducción del sistema más efectivo de protección y un importante paso para generalizar la utilización del cinturón de seguridad por parte de los viajeros en autobús. El cinturón universal permite la regulación en altura idónea en función de la talla del pasajero, desde un niño de tres años hasta un adulto, por lo que puede ser utilizado por todo tipo de viajeros sin necesidad de alzas o dispositivos de retención específicos. Otra de sus ventajas es que se ajusta automáticamente.
La introducción de esta novedad responde al constante interés de Alsa por mejorar la Política de Seguridad con la que opera sus servicios. En 2006 la compañía, en colaboración con el Instituto Universitario para la Seguridad del Automóvil (INSIA), desarrolló un programa específico para la instalación voluntaria del cinturón de seguridad en los vehículos de su flota de Largo Recorrido matriculados antes que entrase en vigor su obligatoriedad (a partir de octubre del 2007 es obligatoria su instalación en los vehículos de nueva matriculación). Ello ha supuesto que el 100% de la flota de Alsa destinada a servicios de Largo Recorrido dispone de cinturón de seguridad, lo que significa se ha adelantado en cinco años respecto al cumplimiento de los requerimientos legales.
