Dicha norma será de aplicación a las nuevas autopistas privadas que se construyan, lo que implica que sobre las ya existentes sólo se aplicará en caso de renovación o modificación del contrato con la empresa concesionaria de la autopista, según indica Fenadismer en un comunicado. Los destinatarios de dicha norma son los titulares de vehículos de transporte de una masa máxima autorizada superior a 3,5 toneladas, y para el cálculo de la tarifa de peaje la concesionaria de la autopista tendrá en cuenta el coste de construcción y mantenimiento de la autopista, y además podrá tener en cuenta la categoría medioambiental del vehículo (Euro), el número de ejes del vehículo y el horario de utilización de la autopista. La norma también prevé la posibilidad de que las autopistas concedan descuentos a los usuarios titulares de los vehículos, siempre que no superen el 13% de la tarifa base. Por tanto, mediante dicha norma el Gobierno renuncia a establecer tasas o peajes por el uso de las autovías y vías de gran capacidad de la Red General del Estado.
