¿Y de qué estamos hablando? Pues de un conjunto de empresas europeas, todas de primer nivel como se puede apreciar, que se reúnen cada dos años (esta vez ha sido en Roma) para “promover acciones de apoyo a la transición energética en los sectores empresariales europeos”. Presencia política Al evento, que estuvo moderado por la excomisaria de la UE, Connie Hedegaard, y contó con la presencia del comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, y la viceministra italiana de Medio Ambiente y Seguridad Energética, Vannia Gava, abordó cuestiones como la crisis actual, la guerra de Ucrania, la transición energética, la seguridad del abastecimiento, así como la competitividad y la autonomía estratégica de Europa. Uno de los acuerdos alcanzados por los miembros de la CEO Alliance es el compromiso Sustainable Corporate Building Climate Pledge, por el que proceden a ir descarbonizando sus edificios corporativos a través de “planes de acción que incluyen medidas para la electrificación, la eficiencia energética y la digitalización a implementarse de aquí a 2030”. El CEO de Scania, Christian Levin, asume la presidencia de la entidad para el próximo año La Declaración Conjunta final insta “a los sectores industriales y a los responsables políticos de la UE a aunar esfuerzos para transformar la crisis energética en una oportunidad para Europa, mediante el fomento de la electrificación, la descarbonización, la digitalización y la innovación de los sectores de la energía, el transporte y la industria”.
