El 0500 Transport Case puede utilizarse como:
- Un contenedor de almacenaje: Dispone de más de 262 litros de espacio útil para almacenaje. Sus dimensiones externas son 101,4 cm x 59,5 cm x 72,7 cm y las internas son 88,7 cm x 46,8 cm x 64,1 cm. Su tapa es totalmente extraíble y puede usarse como plataforma para equipos estacionarios -como compresores o motores-; mientras la parte profunda se convierte en una cubierta, al usarse el contenedor al revés.
- Un contenedor de transporte: Es perfecto para transportar y proteger material sensible (como equipos para ferias comerciales, pantallas planas, discos duros, servidores, compresores de aire, herramientas eléctricas, equipos para emergencias médicas o equipos industriales de repuesto). Gracias a su robusto diseño, el 0500 Transport Case es totalmente apilable y la torre de dos contenedores puede manipularse como uno solo.
- Un palé: Este contenedor incluye un kit de elevadores desmontables – como accesorio opcional-, que facilita el acceso de las horquillas de la carretilla elevadora y permite su levantamiento y manejo sin necesidad de usar un palé. Además, el contenedor incorpora dos asas pequeñas en la parte superior de su tapa extraíble, y en la base incluye otras dos asas laterales de doble ancho (diseñadas para poder ser levantada en equipo).
La resistencia y ahorro del 0500 Transport Case
El 0500 Transport Case cuenta con estructuras con núcleo de célula abierta y paredes sólidas para mayor durabilidad; sellos estancos para la protección frente a polvo y líquidos; y válvulas automáticas para la compensación de presiones en los envíos aéreos o a grandes alturas. Estas características lo hacen ser más resistente a los cambios meteorológicos que los demás contenedores (que pueden dejar entrar agua y arena por las juntas). Por lo tanto, su tecnología superior lo convierte en un embalaje capaz de resistir innumerables envíos. Las empresas, además de reducir los posibles daños en sus mercancías, con el 0500 Transport Case pasan a emplear un contenedor reutilizable, en vez de embalajes desechables. Con la utilización del embalaje permanente, el coste por envío decrece, así como los costes asociados al tratamiento de residuo de los embalajes desechables. Así pues, no sólo consiguen ahorrar en reemplazo de embalajes, sino también en mano de obra, al no tener que preparar y deshacer los paquetes.
