Los vecinos de Palma que aún usan la Tarjeta Ciudadana para desplazarse en los autobuses de la EMT deberán iniciar, desde octubre, la transición hacia la nueva Tarjeta Única, que permitirá viajar con un solo soporte en toda la red pública de transporte de Mallorca: autobuses urbanos e interurbanos, trenes y metro.
Esta transformación es fruto de un acuerdo entre el Govern balear y el Ayuntamiento de Palma que busca simplificar el uso del transporte público, mejorar la experiencia de los usuarios y reducir la complejidad de los sistemas actuales, que operaban de forma separada.
Una tarjeta, todos los medios de transporte
La Tarjeta Única supone un cambio importante en la movilidad de la isla. Por primera vez, un solo título dará acceso a los servicios de la EMT Palma, el tren y metro, y los autobuses de la red TIB. Además, se incorpora la opción de pagar el billete con tarjeta bancaria en los autobuses urbanos, lo que facilitará los desplazamientos de usuarios ocasionales y turistas.
La primera emisión será gratuita para quienes no tengan la actual Tarjeta Intermodal, y se podrá obtener en una red ampliada de puntos de tramitación: la Estación Intermodal de Palma, oficinas del TIB en Inca, Alcúdia y Manacor, oficinas municipales de Calvià, Llucmajor y Marratxí, y también en la Oficina de Atención Ciudadana de Palma (OAC).
Más de 570.000 residentes en Mallorca ya disponen de la Tarjeta Intermodal
El proceso de implantación se hará de forma progresiva. La Tarjeta Ciudadana y la Tarjeta Única convivirán hasta el final del primer trimestre de 2026, momento en el que la antigua dejará de ser válida para el transporte, aunque seguirá activa para otros usos como el acceso a contenedores de orgánica o la descarga del certificado de residencia.
Más accesibilidad, sostenibilidad y digitalización
El Consorcio de Transportes de Mallorca también trabaja en una versión digital de la Tarjeta Única, que permitirá llevarla en el móvil. Esta funcionalidad se espera para el primer semestre de 2026 y representa un nuevo paso hacia la modernización del sistema.
Hoy, más de 570.000 residentes en Mallorca ya disponen de la Tarjeta Intermodal, de los cuales un 41 % vive en Palma. Las administraciones insisten en que esta medida no solo mejora el acceso al transporte, sino que forma parte de una estrategia más amplia: reducir el uso del coche privado, descongestionar el tráfico y fomentar una movilidad más sostenible y eficiente.
Con esta integración, Palma y el resto de la isla dan un paso decidido hacia un modelo de transporte más conectado, pensado para facilitar el día a día de residentes y visitantes por igual.
