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Pere Padrosa, presidente de Astic: ‘Debemos sobrevivir frente a la política que marca la UE’

viernes 15 de mayo de 2009, 01:00h

"Analizar la situación del Sector en la tremenda crisis en la que estamos inmersos es tarea casi imposible, cuando los propios economistas y políticos están cambiando sus previsiones diariamente", reconoce el presidente de Astic. No obstante, Padrosa ha ofrecido a NEXOTRANS su visión del actual panorama.

Para Padrosa, el Sector está "algo peor que algunos sectores industriales, también debido a que crecíamos por encima de la media". "Ahora bien, en relación a la crisis global de mercado, estamos más o menos igual", agrega. Ahora, el dirigente recuerda que en ya en 2004 se pidió la reconversión del Sector, "debido a la liberalización de los contingentes de tarjetas de transporte, donde dejábamos claro que el Sector no estaba preparado para regularse por sí solo". "Aquellos polvos han traídos estos lodos, ya que las medidas que se tomaron en su momento  quizá no fueron suficientemente valientes para afrontar la situación que se nos avecinaría un momento u otro. Buena prueba de ello es que hemos soportado cíclicas huelgas de transporte", reflexiona. Y ahora, "se han juntado la crisis económica global, financiera y real, con la estructural de nuestro Sector, a medio camino de cualquier parte".

"Debemos entender que nuestro Sector es intensivo en capital y en mano de obra, y si advertimos los índices macroeconómicos, veremos que el paro y la financiación son los talones de Aquiles de esta crisis", continua el presidente de Astic. "La verdadera realidad de nuestro Sector es que nos vemos envueltos en una lucha por la supervivencia empresarial en contra de la política que marca la UE en tema de transportes"

"Siendo así las cosas -finaliza Padrosa-, en realidad estos son los planteamientos y retos que debemos identificar, diagnosticar, proponer la solución y finalmente ejecutar como Sector en general, pero mucho más importante como empresas en particular, ya que así como la alegría de los buenos momentos se suele contagiar en el reparto de la riqueza, la soledad de los momentos duros en la mayoría de los casos cada uno se lo tiene que resolver, eso sí suponiendo que nuestros gobernantes hagan bien sus deberes".