Un total de 28 hombres y dos mujeres, con una edad media de 36 años, han recibido ayer las distinciones de manos de Pedro Calvo, quien ha expresado su convencimiento de que la Empresa Municipal de Transportes "ofrece uno de los mejores servicios de transporte público en superficie que pueden darse hoy en día en cualquier parte del mundo".
El curso, cofinanciado por el Fondo Social Europeo y celebrado en las instalaciones de la EMT, se integra en el Plan de Formación para la Inserción Profesional (Plan FIP) que subvenciona a empresas que forman trabajadores desempleados que dispongan del permiso de conducir D (para autobuses) y el Certificado de Aptitud Profesional (CAP), que tengan seis meses de experiencia en conducción de autobuses y que hayan pasado un proceso previo de selección.
El Ayuntamiento dedica 30 días hábiles a la formación de conductores de nuevo ingreso en la EMT, lo que la convierte en una de las empresas que más, mejor y más pronto imparte formación a sus empleados. Además, la empresa municipal imparte formación complementaria para los conductores que ya forman parte de la plantilla con el fin de actualizar conocimientos y mejorar continuamente la calidad de la conducción: cursos de nuevas tecnologías, de conducción eficiente, de conducción eficaz y segura, de perfeccionamiento, o de actualización, entre otros.
Formación esencial
Desde la EMT aseguran que la apuesta por la formación de sus empleados es una herramienta básica para la mejora continua. En 2008 ha impartido 82.575 horas de formación a conductores de nuevo ingreso, lo que supone 225 horas por conductor (367 conductores de nuevo ingreso), y 37.604 horas de formación continua a 5.182 conductores de plantilla, es decir, 7,25 horas por conductor. La plantilla efectiva media de conductores era de más de 5.300 personas en 2008, frente a 4.900 personas en 2005, lo que evidencia el compromiso de la EMT por el aumento del empleo.
La formación ha redundado en una disminución del número de colisiones anual en la flota de la EMT. El índice actual de accidentalidad por millón de kilómetros recorridos en la EMT de Madrid es el más bajo de España, situándose en 0,83 por conductor efectivo.
