Bajo el lema ‘actuar y adaptarse’, la Semana Verde, que constituye la mayor conferencia anual dedicada a la política medioambiental europea, va a examinar las múltiples facetas de los desafíos que plantean la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel de la UE y a escala mundial y la adaptación al cambio climático que ya se está produciendo. Ocho de las sesiones se dedicarán también a intentar presentar una visión realista de un mundo con pocas emisiones de carbono en 2050.
Se prevé la participación en este acto de tres días de más de 4 000 personas procedentes de Europa y del resto del mundo. José Manuel Barroso, presidente de la Comisión, pronunciará un importante discurso en la sesión de clausura el 26 de junio, que examinará las perspectivas que ofrecerá en el futuro el acuerdo de Copenhague.
El comisario de Medio Ambiente, Stavros Dimas, ha declarado que "con la conferencia de Copenhague que se aproxima, el año 2009 puede pasar a la historia como un año clave en la lucha por impedir que el cambio climático alcance niveles peligrosos, causando estragos a gran escala en la población".