La nueva compañía, participada al 50% por ambas empresas, tiene su sede en Changchun, al noreste de China, y también prestará apoyo en investigación y desarrollo, así como exportaciones, según han señalado los responsables de FAW.
La producción de los vehículos, que llevarán la marca FAW en el mercado local, se concentrará en dos fábricas ya existentes en el noreste y el suroeste de China, en las ciudades de Harbin y Qujing, respectivamente.
General Motors considera clave su presencia en China, el mercado donde más automóviles se venden en el mundo, llegando a superar este año por primera las ventas registradas en Estados Unidos.