El 1 de enero de 2008 entró en vigor en Suiza un incremento importante de la denominada tasa ligada a las prestaciones, que pasó para los Euro 1, 2 y 3 de 2,88 céntimos de francos suizos por t./km a 3,07 céntimos; para los Euro 4 de 2,52 a 2,66 céntimos y para los Euro 5 de 2,15 a 2,26, siempre por tonelada y kilómetro. El incremento medio rozaba el 17,7%.
Según informa Astic, las asociaciones suizas de transportistas impugnaron las subidas por entender que el transporte por carretera ya cubriría los costes de infraestructuras, por lo que no cabía imponer nuevas subidas tarifarias. El Tribunal Administrativo Federal Suizo, en segunda instancia, dio la razón al Sector, anulando la subida de tarifas. Sin embargo, el gobierno suizo ha anunciado que recurrirá la sentencia ante el Tribunal Federal, que es su última instancia, por lo que la misma todavía no es firme.
Lo que ha hecho el gobierno suizo, con el objetivo de evitar una avalancha de reclamaciones por parte de transportistas extranjeros, ha sido reducir el importe que éstos pagan a la cuantía anterior a la subida del año 2008. Astic ha aclarado que todavía no se sabe con precisión si los operadores que durante estos últimos años hayan pagado las tasas por los importes indebidamente incrementados podrán solicitar una restitución por la diferencia, pero la opinión de los asesores de la asociación suiza que ha protagonizado el pleito es más bien negativa, porque el hecho de haber pagado sin hacer constar la protesta puede implicar la aceptación de la subida.
De todas maneras, puede suceder que la Sentencia de la Corte Federal establezca el carácter retroactivo y de lugar a una restitución a cargo del estado suizo.
