Las declaraciones de Calvo fueron realizadas durante la presentación de un estudio sobre la movilidad en las grandes ciudades.
"En la compra que tendremos que decidir en este año para los vehículos que recibiremos en el 2012 y 2013 hemos excluido expresamente de los pliegos de compra los vehículos diesel, incluso en los híbridos", apuntó Calvo, quien subrayó que en la EMT ya se ha tomado esta decisión. De hecho, explicó que para la compra de autobuses de este año, un 80% ya son vehículos de Gas Natural Comprimido (GNC), y tan sólo han comprado los autobuses diésel que no estaban en el mercado con otra tecnología, como los articulados o los vehículos de determinados tamaños —unos 60 aproximadamente—.
El compromiso de no volver a comprar un vehículo diésel incluye a los híbridos. "Si los fabricantes no son capaces para determinados modelos de ofrecernos una propulsión distinta a la diésel no compraremos esos vehículos", aseveró Calvo. En el caso de los articulados, señaló que si no dejan de ser diesel, no compraran articulados y sí más autobuses menos contaminantes. "Tendremos que mejorar y aumentar la frecuencia del paso en esas líneas en las que están", agregó. "Los fabricantes tienen que ser capaces en un espacio corto de tiempo de hacer una apuesta por los vehículos híbridos utilizando combustibles distintos al diesel: el GLP; Gas Natural o la gasolina, que cumplirá con las partículas y los dióxidos de carbono mejor que lo que va a hacer el diésel", reflexionó.