En este curso, que ha tenido lugar entre los pasados 5 y 9 de julio y que ha sido dirigido por el presidente de la EMT y delegado de Seguridad y Movilidad, Pedro Calvo, se han analizado diversos aspectos relacionados con la repercusión que la difícil situación económica actual tiene en la movilidad de las grandes ciudades y en sus sistemas de transporte público.
En la conferencia inaugural del curso, titulada ‘Soluciones de movilidad para la crisis’, Pedro Calvo señaló que los informes municipales han constatado que los mayores problemas de movilidad se presentan en las principales vías de acceso a Madrid, aunque los tramos de congestión constituyan sólo un 3% del todo el viario y se concentren en las llamadas "horas punta". Calvo cifró el coste de esa congestión en 3,4 millones de euros al día, 839 millones al año. Supone una pérdida de 329.000 horas al día, 81 millones al año. "El tiempo medio perdido por cada usuario es de 14 minutos diarios —ilustró Calvo—, lo que equivale a siete días de vacaciones cada año". De ahí que uno de los pilares de la política municipal del Ayuntamiento de Madrid sea la apuesta por el transporte público.
Madrid es la ciudad del continente con mayor uso del transporte público, muy por encima de Londres, París o Berlín". Según el concejal, hay cuatro objetivos básicos en la política de transporte para una ciudad sostenible: reducir la necesidad de movilidad en automóvil; promover el cambio modal; abordar un planteamiento urbanístico y territorial congruente con una política de transporte sostenible, y aumentar la eficiencia tecnológica, imprescindible para incrementar la energética y reducir las emisiones contaminantes. La movilidad es, además, un factor decisivo que condiciona la competitividad de toda ciudad.
Calvo puso como ejemplo la relación entre el empleo y el uso de transporte público, puesta de manifiesto por el segundo Informe del Estado de la Movilidad de la Ciudad de Madrid. En la actual coyuntura de crisis económica, "a un descenso del 4,3% en el número de afiliaciones a la Seguridad Social en la Comunidad de Madrid, le ha correspondido un descenso cercano al 5% en el transporte público". Sólo se salva el autobús urbano de la EMT, único modo de transporte que no acusa la disminución general, sino que registra incluso una ligera subida del 0,2% en el número de viajes. El informe refleja también que en el interior de la ciudad ha disminuido el uso del transporte público del 78 al 74%, mientras que en los desplazamientos entre zonas de la periferia ha aumentado del 51% al 60%, "lo que representa una respuesta positiva a la oferta de nuevas líneas transversales de la EMT". En este curso se han celebrado, además mesas redondas sobre la incorporación de la bicicleta pública a los sistemas de transporte público de las ciudades y las nuevas soluciones para favorecer la movilidad. También se ha debatido sobre el vehículo eléctrico y la diversificación energética aplicada a flotas de autobuses. Se ha analizado, asimismo, el papel de la economía y de la movilidad como factor de desarrollo; y Miguel Ruíz, presidente de Atuc y gerente de la EMT de Málaga, ha expuesto el papel de las empresas como dinamizadoras de la economía.
Participación en CIT 2010
El IX Congreso de Ingeniería del Transporte, celebrado entre el 7 y el 9 de julio en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales, ha contado también con la participación de la EMT
de Madrid, concretamente con ponencias dedicadas al transporte urbano de viajeros. Se han tratado desde las últimas novedades en material móvil, combustibles menos contaminantes y mejoras en la accesibilidad hasta los más novedosos sistemas tecnológicos aplicados al servicio al cliente. Juan Ángel Terrón, director de Ingeniería de la EMT, presidió y moderó una de las sesiones dedicada al transporte urbano y metropolitano. El programa del congreso incluyó adicionalmente una visita especial al Centro de Operaciones de Carabanchel.
