Padrosa agrega que, en junio de 2008, se pactó con el Gobierno el "apoyo en el ámbito comunitario a las posiciones consensuadas con el sector en relación con la Euroviñeta y la tarificación de infraestructuras". "Entendemos que los representantes españoles deben seguir oponiéndose a esta propuesta", continúa.
Desde Astic recuerdan que en España los costes externos totales procedentes del transporte de mercancías superaron los 5.100 millones de euros en 2005 (excluidos los costes de congestión) lo que equivale al 0,6% del PIB. Ello pese a que "el Sector ha realizado un esfuerzo considerable en los últimos años por reducir sus costes externos. Dicho esfuerzo ha sido superior al realizado por otros modos lo que ha producido que el transporte de carretera ha recortado sustancialmente la diferencia en cuanto a la generación de externalidades".
Por esta razón, la Asociación del Transporte Internacional por Carretera cree necesario que, antes de establecer una política de tarificación, se alcance "un consenso entre los diferentes agentes implicados sobre cómo deben valorarse los costes externos". Además, "parece necesario que la Unión Europea incorpore en sus valoraciones elementos de distinción entre países y circunstancias geográficas y se debería considerar también que toda producción de energía genera de un modo u otro unos costes externos", finaliza.
Anuncio de medidas
Por su parte, desde Asetranspo advierten que la aplicación de esta directiva europea acarreará un incremento de los costes y precios, lo que podría producir que los transportistas convoquen un paro a nivel nacional en protesta por la medida. Jesús Rodríguez Vieites, presidente de la Asociación de Empresarios de Transportes Discrecionales de Mercancías de Pontevedra, afirma que "sabemos que los Estados Miembros quieren fortalecer con ello sus presupuestos; se trata de un asunto que nos preocupa porque además conocemos que la Presidencia belga es favorable y quiere dar prioridad al dossier para llegar a un acuerdo antes de finalizar el año". Rodríguez también recuerda que "el Sector hace mucho tiempo que se preocupa por el medio ambiente", y que ya internaliza "un tercio de las externalidades", por lo que una doble imposición y el incremento de tasas resultaría "inadmisible". Por todo ello, "Asetranspo se une al rechazo de esta directiva europea, postura ya expresada por el presidente de la Confederación Nacional CETM que sostiene la oposición firme y total ante la posible implantación de la Euroviñeta".
Finalmente, la Asociación Española de Empresarios de Transporte Bajo Temperatura Controlada (Atfrie ), representante del transporte frigorífico en el Comité Nacional de Transporte, también ha expresado su rechazo, "frontalmente y en su totalidad", ante "cualquier opción que signifique la imposición de un peaje al transporte pesado". "Independientemente de la situación de crisis que atraviesa el sector en general, y el frigorífico en particular, por las adversas condiciones meteorológicas, mayor consumo de combustible por el equipo de frío y más de un 30% de las flotas paradas, la implantación de este peaje supone la ruptura de los acuerdos entre el Ministerio y el Comité Nacional de junio 2008, y esto no lo puede admitir el Sector, tal como se acordó en la reunión del último Comité", reza su comunicado.
"Instamos al Ministerio de Fomento a desechar la medida", continúa el documento, recordando que el Sector se encuentra "cansado de ser el pagano de los antojos y no dispuesto a soportar más abusos".
