Desde su fundación en el año 2000, Moldstock ha seguido fielmente la filosofía que inspiró su creación, la de convertirse en el socio de la logística de sus clientes, para gestionar su cadena de suministro con un servicio eficaz y personalizado como si realizaran estas actividades internamente, indica el comunicado de la compañía.
Para ello, Moldstock dispone de más de 40.000 m2 de instalaciones situadas en la Península Ibérica, por donde pasa, se gestiona y circula más del 40% de la logística europea. Esta superficie se reparte entre sus 11 centros logísticos, ubicados en Barcelona (3), Valencia (2), Girona, Alicante, Madrid, Irún, Lisboa y Oporto. Dichos centros tienen una capacidad de almacenaje para unos 45.000 palets y están dotados de equipos de manutención, gestión y comunicación de última generación.
En los centros de Moldstock trabaja un equipo de profesionales con una gran cualificación y experiencia: más del 70% de la plantilla supera los 14 años en el sector. Este personal puede gestionar toda la cadena de suministro de los clientes, desde la recepción o la recogida en origen de la mercancía hasta la entrega al cliente final.
Oferta de servicios
Moldstock ha desarrollado asimismo varios servicios ajustados a las necesidades más específicas de los clientes, como los recientemente presentados Mold e-logístic@, orientado al comercio electrónico, y Mold Devolución, enfocado a la logística inversa.
"En esta coyuntura que no es fácil para ninguna empresa, Moldstock agradece más que nunca la confianza depositada por los clientes que han externalizado su logística a nuestra organización a lo largo de estos años", afirma Manel Torres, director general de Moldstock Logística, añadiendo que "sin ellos hubiese sido imposible cumplir la primera década de existencia de nuestra empresa; estamos seguros que, gracias ellos, seguiremos celebrando más aniversarios y trabajando con la misma ilusión del primer día".
