En la encuesta de calidad que realiza anualmente el Consorcio Regional de Transportes, el 80% de los usuarios ha manifestado que el intercambiador está mejor o mucho mejor que el año pasado.
La construcción de esta isla en superficie se inició tras la puesta en funcionamiento del intercambiador subterráneo y ha dotado a la entrada a Madrid desde la A-1 del mayor intercambiador de transportes de Europa, por el que pasan al día 270.000 personas, de las que 60.000 utilizan la isla en superficie y el resto los niveles subterráneos.
La isla exterior cuenta con una superficie de 12.300 m², de los que 6.250 son cubiertos. Está dotada de 18 dársenas, de las que 16 sirven de cabecera a líneas urbanas de la EMT y 2 a interurbanas. Su construcción supuso una inversión de 17 millones de euros y se realizó de forma paralela a la modernización y reforma de la zona de intercambio con la red de Metro, por lo que la inversión total alcanzó los 36 millones de euros.
El balance de este primer año de funcionamiento refleja que cada día se producen en la zona exterior 7.500 movimientos de autobuses, de los que 550 se concentran en la hora punta, entre las 9 y las 10 de la mañana. La línea con mayor demanda es la 27, que cubre el trayecto Glorieta de Embajadores-Plaza de Castilla, con casi 10.000 usuarios que suben o bajan en Plaza de Castilla.
