Los transportostas agrupados en la Asociación de Empresarios de Transporte de Santander y Cantabria (Asemtrasan) comenzaron la huelga el pasado lunes como medida de presión para conseguir subir los precios por tonelada de madera, que no se revisaba desde el año 2005. Enfrentados a las empresas productoras, alrededor de 20, sólo ofrecen el 8,5% de incremento en el precio de tonelada transportada, tanto en largo como en corto recorrido, del 10% que solicitan los transportistas de este sector.
Alrededor de 200 camiones parados y unas 100 empresas de Cantabria que transportan la madera a empresas transformadoras de esta comunidad y de otras colindantes como Euskadi y otras algo más alejadas, todas en nuestro país.
Comienzo de la huelga
En la noche del sábado cinco de enero se acordó esta medida de presión, de carácter indefinido, a la espera de conseguir el incremento del precio del transporte que consideran razonable, haciendo especial hincapié en el coste del gasóleo. Por su parte, Ignacio del Castillo, secretario técnico de Asemtrasan, confió en conseguir un acuerdo satisfactorio para ambas partes, "pues las peticiones de los transportistas de madera son razonables y asumibles por los empresarios madereros de Cantabria". Del Castillo recordó que hay que revisar los precios del transporte en Cantabria porque el gasóleo está muy alto. Y finalizó puntualizando que en este momento se hace imposible prestar un buen servicio si los transportistas no suben los precios.