Ello a causa de los impuestos, limitaciones y sanciones que afectan de lleno a la industria automotriz. Sin embargo Sánchez Torres recalcó que esta situación "no podrá con el automóvil", ya que supone "la expresión y el resumen del concepto de libertad".
Durante su balance anual el presidente de Ganvam no pudo evitar hacer mención al difícil 2010 que ha vivido el sector, frente a lo cual invitó a "no marear más la perdiz" solicitando al Ejecutivo un nuevo plan de ayudas o una reducción del IVA que "nunca llegarán", sino que "jugar las cartas que hay", sin lamentaciones y tratando de hacer autocrítica para no cometer los mismos errores que en el pasado.
En este contexto, Sánchez Torres llamó a analizar los "defectos y excesos" cometidos en épocas de vacas gordas y a ajustar, después de tres años de crisis, los puntos de venta y las plantillas a la realidad del mercado español, cuyas ventas deberían situarse en torno a los 1,3 millones de unidades si se consideran las variables de población y renta per cápita.
Por otro lado, el responsable de los vendedores defendió que las empresas de la distribución, dado el actual contexto económico, deben centrarse especialmente en la información, la formación y el asociacionismo en el sector. "Quien no lo haga estará perdido", apostilló.
Vertebración coyuntural
Uno de los puntos en los que más enfatizó Sánchez Torres durante su discurso fue la necesidad de que el sector del automóvil se vertebre en defensa de asuntos de interés recíproco y coincidentes, como son las medidas contra crisis. Ahora, dicha vertebración debe ser coyuntural, centrada en asuntos concretos, y no estructural, ya que fabricantes, importadores y vendedores representan intereses antagónicos donde "el grande acabaría por controlar al pequeño". "Vamos a casarnos, pero por el civil y con capitulaciones matrimoniales", bromeó. Un primer paso ya ha sido dado, acotó, al haberse constituido por primera vez una mesa de trabajo entre fabricantes (Anfac) y vendedores (Ganvam) con el fin de dialogar y buscar soluciones consensuadas a algunos de los principales problemas que afectan a la relación entre ambas partes.
Otro de los asuntos que el presidente de Gamvam tocó durante la comida con la prensa fue el tibio rol que el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio juega en relación a los vendedores. "Al MITYC le sobra la 'C' de Comercio ya que parece que para este ministerio sólo existen los fabricantes, con los que se reúne y a los que parece escuchar, y ello es satisfactorio, pero insuficiente", señaló. Y lo que es peor aún, "hace apenas unos días el Ministerio ha rechazado todas las operaciones del Plan 2000E, adelantadas por los agentes de ventas afiliados a Ganvam, que no se incluyeron en el sistema, basándose en problemas del propio sistema", agregó. Se trata, según Sánchez Torres, de 5.997 operaciones, que equivalen a 2.700.000 euros de pérdidas, y ello sólo para los afiliados a Ganvam. Sin embargo, el presidente de los vendedores quiso terminar su intervención con una nota más positiva, llamando a los asistentes a convertir la crisis en oportunidad. "Dudo mucho que vuelvan a haber condiciones tan óptimas como ahora para adquirir un vehículo", finalizó.
