Lo acompañaron en la presentación Rafael Olivares, director gerente de la Fundación Rose; José Luis Giménez, director general adjunto de Abertis, y Enrique Villalonga, director general adjunto de Abertis Autopistas y director general de Aumar. Olivares, el primero en tomar la palabra, explicó que el estudio nació al detectarse la falta de datos específicos para el transporte pesado en materia de siniestralidad vial, eligiéndose a Fesvial porque "daba garantías de un trabajo serio y riguroso". En cuanto a Gutiérrez, destacó la importancia que tiene la seguridad vial —es un tema de responsabilidad de gestión, reflexionó— para un gestor de infraestructuras como Abertis Autopistas y la necesidad de poner el foco en el sector del transporte ya que se trata de "clientes especiales que requieren una atención especial": Dado que el uso de las carreteras se produce dentro de una actividad productiva, un accidente tiene otras connotaciones añadidas, como la pérdida de productividad, explicó. Finalmente, Villalonga hizo referencia al factor humano, el que más interviene cuando hablamos de seguridad vial, y subrayó que el documento presentado "es la culminación de un trabajo que lleva tiempo, un trabajo interdisciplinario".
Patrocinado por la Fundación Rose y Abertis Autopistas y realizado por Fesvial, el estudio ha contado con el apoyo de Scania y el asesoramiento técnico de GFK-EMER
La siniestralidad del Sector en cifras
A modo introductorio, Luis Montoro destacó el esfuerzo realizado en la elaboración del estudio, que calificó, por un lado, como "una deuda que tenemos con los transportistas" y, por otro, como "un regalo al mundo del transporte y a la sociedad". "Los resultados obtenidos son muy claros y, sobre todo, útiles", remarcó.
El objetivo fundamental del estudio ha sido investigar y determinar los factores, consecuencias y causas que más intervienen en los accidentes con víctimas en los que hay implicado un vehículo de más de 3,5 t (no se incluye al transporte de pasajeros), así como sus circunstancias espacio-temporales. Para ello se analizaron los accidentes en relación a distintas variables, como edad del conductor, antigüedad del vehículo, momento del accidente (hora, día, mes), tipo de vía donde se producen, Comunidad Autónoma, causa de los accidentes, gravedad de los mismos, etc. Cabe destacar que se incluyen los accidentes ocurridos en 2009, a los que se ha prestado especial atención, si bien el informe se ha elaborado con datos —aportados por la DGT y Fomento— a partir de 2004.
En el mencionado periodo de tiempo se han producido 29.447 accidentes con víctimas (3.533 en 2009), con un total de 44.614 víctimas, de las cuales 3.265 fallecieron, 8.425 fueron heridos graves y 32.924 heridos leves. En cuanto a los vehículos involucrados en estos accidentes, han sido 62.889, habiendo estado implicados 60.728 conductores. De ellos, 31.869 corresponden a conductores de vehículos de más de 3,5 t.
Uno de los datos más interesantes que arrojó el estudio es que entre 2004 y 2009 hubo 32 accidentes por cada 10.000 vehículos, tasa que sube a 128 accidentes por cada 10.000 vehículos si hablamos de ‘pesados’. Sin embargo, la siniestralidad en los vehículos pesados es mucho menor ya que éstos recorren, en promedio, 7 veces más kilómetros que los turismos. Es decir, si se analiza el riesgo por kilómetro recorrido, nos encontramos con que el transporte pesado es mucho más seguro. Por otra parte, la evolución de la seguridad del transporte también es mejor en el caso de los conductores profesionales, ya que no sólo ha disminuido la siniestralidad, el número de accidentes con víctimas y la gravedad de los mismos, sino que lo ha hecho en mayor proporción que en el resto de los vehículos.
Más información sobre este estudio se publicará en la edición del lunes de NEXOTRANS.com
