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VDL Bus & Coach entrega dos unidades de su Citea híbrido para la ciudad holandesa de Enschede

De 12 metros y piso bajo, entrarán en operación con usuarios durante el próximo mes de febrero

viernes 31 de diciembre de 2010, 01:00h

A principios de diciembre de 2010 se presentaron en la localidad de Enschede dos autobuses urbanos híbridos. Se trata de Citeas con una longitud de 12 metros y con piso totalmente plano. A partir del mes de febrero de 2011 entrarán en servicio con clientes, bajo la consigna de ‘La línea 2 se viste de verde’.

Durante un periodo de dos años se acumulará información acerca de las características de funcionamiento de estos autobuses y los datos de durabilidad correspondientes.

Los promotores de este proyecto de transporte público son Regio Twente (Twente es una región del este de Holanda) y el municipio de Enschede, con la empresa de autobuses Connexxion como socio. VDL Bus & Coach, Vossloh Kiepe, la Universidad de Twente y la oficina de asesoramiento e ingeniería DHV son co-ejecutores del proyecto.

El desarrollo de estos Citeas híbridos se inició en el año 2009, en el marco del programa de innovación ‘El Automóvil del Futuro se pone en Marcha’, una iniciativa del gobierno de los Países Bajos. El objetivo que se pretende con este programa es acelerar el lanzamiento al mercado de innovaciones encaminadas a lograr un transporte silencioso, limpio, de bajo consumo, inteligente y seguro. El desarrollo de los dos Citea híbridos encaja perfectamente en este programa y supone una aportación a una valiosa innovación en la industria de automoción.

Objetivos

Para el desarrollo de esta nueva generación de autobús híbridos se mejorarán las técnicas existentes y se aplicarán nuevas tecnologías. Los objetivos que se pretende alcanzar son, entre otras cosas, un sustancial ahorro de combustible y la reducción de las emisiones de CO2, micropartículas y NOx. Esto se consigue gracias al sistema eléctrico de propulsión del Citea, en el que el motor diésel funciona como generador de la energía eléctrica.

La nueva versión recupera la energía de frenado y el motor diésel sólo arranca por encima de una velocidad determinada y se apaga en las paradas o cuando se inmoviliza el vehículo. Para la puesta en movimiento sólo se utiliza el motor eléctrico. Esto significa un 0% de escapes de gases nocivos. Esto tiene una ventaja adicional en lo que se refiere al medio ambiente, ya que la producción de ruido es considerablemente más reducida.