En febrero de 2005, la Autoridad Portuaria de Barcelona presentó oficialmente el Plan de Reestructuración y Ordenación de Acceso del Transporte vinculado al Puerto de Barcelona (Proatrans). Dentro de los acuerdos adoptados entre todos ls operadores económicos que desarrollan su actividad en el recinto portuario, la CNC identificó como contrarios a la competencia algunos de ellos. Concretamente, el régimen de autorizaciones diseñado para que los transportistas pudiesen acceder a las instalaciones portuarias, por resultar discriminatorio para ciertos transportistas.
Consecuentemente, el 2 de marzo de 2009 la Dirección de Investigación de la CNC acordó la incoación del correspondiente expediente sancionador contra la Autoridad Portuaria de Barcelona y una serie de asociaciones en el ámbito del puerto de Barcelona.
La Autoridad y el resto de imputados solicitaron la apertura del procedimiento de Terminación Convencional, en virtud del cual si los presuntos infractores proponen compromisos que resuelvan los efectos sobre la competencia derivados de las conductas anticompetitivas, la CNC puede acordar finalizar el expediente sancionador sin imponer sanción. Así, los compromisos alcanzados se centran en exigir a los transportistas unos requisitos para acceder al puerto (régimen de autorizaciones) y a las plazas de aparcamiento en igualdad de condiciones, desapareciendo por tanto los efectos discriminatorios contenidos en el antiguo plan.
La CNC considera que estos acuerdos son adecuados para eliminar las barreras de entrada detectadas hasta el momento para que los transportistas, especialmente autónomos, puedan acceder al recinto portuario en igualdad de condiciones con otras categorías de transportistas.
