Desde la asociación consideran que "las empresas del sector están sumidas en una muy difícil situación como consecuencia del descenso de la demanda por la falta de actividad y las dificultades de acceso a la financiación, unidas al incremento de la morosidad, el déficit tarifario y al constante aumento del precio del combustible".
El transporte por carretera es, según Asintra, "una pieza clave para el desarrollo económico y social de España, el único capaz de garantizar la movilidad de personas y mercancías", por lo que, a su juicio, la implantación de esta medida tendría "efectos negativos inmediatos en la competitividad de toda la economía española, encareciendo el precio de los productos y dificultando la movilidad". Asintra insiste en que "se trataría de una medida inflacionista que lastraría todavía más la producción y el consumo, cuya recuperación es imprescindible para salir de la crisis en la que nos encontramos".
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