En época de restricciones presupuestarias, los responsables de la empresa pública Cimalsa han modificado el proyecto inicial transformándolo en uno más operativo, de rápida ejecución y con un presupuesto que se ha reducido a una tercera parte de lo previsto inicialmente. La noticia fue comunicada de forma oficial por el director general de Cimalsa, Isidre Gavín, al Consejo de Alcaldes i Alcaldesas de l’Alt Empordà.
Aunque el director general de Cimalsa, fue extremadamente prudente a la hora de dar cifras y, sobre todo, de comprometerse en plazos, sí dejó claro que los 150 millones de euros con los que estaba presupuestado el nuevo Logis Intermodal El Far d'Empordà-Vilamalla, con el proyecto en el que han estado trabajando en los últimos meses y que antes de ayer presentaron a los alcaldes ampurdaneses, el coste no superaría los 45 millones. "Se trata de una primera fase, pero más que suficiente para acoger todo el tráfico de mercancías que en los primeros años podría pasar por Vilamalla. Tiempo habrá para ir ampliando las instalaciones", explicó.
Cimalsa adjudicará este mismo mes el estudio informativo y el de impacto ambiental. La financiación de las obras irán a cargo de la Unión Europea y del Estado, en la vertiente ferroviaria, y de la Generalitat, en el equipamiento.
