El consejero ha hecho hincapié en que, por encima de todo lo demás, pretende "asegurar los niveles de servicios" del Metro madrileño y también ha destacado el mayoritario uso del abono transportes, con el que el coste del trayecto está en torno a los 55 céntimos. "No es un precio excesivo si comparamos con el de cualquier otra capital", ha precisado.
Según ha publicado Europa Press, entre las cuestiones que pueden suponer un aumento de ingresos, Cavero ha puesto como ejemplo los locales comerciales que se pueden explotar en los intercambiadores. "Hay una gran oportunidad de hacer una pequeña ciudad bajo tierra", ha dicho. Una idea con la que Cavero cree que pueden aumentar las cifras de ingresos al tiempo que se ofrece a los usuarios "mucha mayor comodidad" porque, al hacer un cambio de línea, puede tener a su servicio cafeterías, comercios, etcétera.
Otra de las cuestiones en las que, según Cavero, pueden aumentar los ingresos pasa por sacar un mayor partido a los soportes publicitarios del Metro, donde se anuncian diferentes marcas y empresas. En cuanto a los gastos, el consejero madrileño ha puesto como "ejemplo" la reducción de altos cargos, "que ha sido de un 50% en los últimos dos meses".
"Hay margen de mejora para, sin reducir la calidad del servicio y manteniendo los niveles de gestión de riesgos, demos un servicio público de calidad", ha reiterado, para advertir a continuación que las tarifas están "congeladas", por lo que "es prematuro hablar de la gestión de precios", ha concluido.
