Antecedentes
El artículo 19 de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres (LOTT) establece que la revisión anual de las tarifas de los servicios públicos regulares interurbanos permanentes de uso general de transporte de viajeros por carretera en régimen de concesión se realizará tomando como referencia la variación media anual de los índices de precios al consumo del año anterior respecto del precedente. La variación media anual del 2010 respecto del 2011 ha sido del 3,2%, siendo este el valor utilizado para realizar la revisión tarifaria en el segundo trimestre de este año.
Como el pasado 23 de julio, mediante la Orden FOM/2069/2011, de 21 de julio, se revisaron a cuenta estas tarifas, incrementándolas un 2,2%, a la revisión que corresponde realizar el próximo mes de abril habría que restarle el incremento ya realizado. Es decir, nos encontraríamos ante un incremento del 1%, una décima parte de lo que se está pidiendo.
Subida insuficiente, situación crítica
No por ser una obviedad ya a estas alturas es un argumento menos válido: La crítica situación en la que se encuentran sumidas muchas empresas del Sector hace indispensable esta revisión extraordinaria. Para Asintra, dicha situación se ve en elementos como "la fuerte caída de la actividad económica que se está produciendo, que hace que las tasas de movilidad también hayan caído, la disminución de la demanda, cifrada en un 19% desde que se inició la crisis en el verano de 2007, y la evolución al alza del precio del gasoil, que en enero ha alcanzado su máximo histórico situándose en 1,36 €/litro superando el record alcanzado en 2008, con un incremento interanual cercano al 18%, a lo que hay que añadir el aumento fiscal al igualarse prácticamente el gasóleo profesional al particular".
Ante este panorama, la patronal pide una revisión tarifaria extraordinaria, "que no a cuenta", para "reequilibrar las concesiones de servicios regulares".
Asintra, a través del CNTC, había pedido en diciembre un incremento del 7,7%. Sin embrago, ante el constante incremento del precio del gasóleo en las últimas semanas, considera ahora que la revisión debe cifrarse en un 10%. "El sistema de revisión tarifaria no ha contemplado los fuertes incrementos de costes sufridos por el Sector, especialmente los del combustible, personal y financieros", finalizan desde la federación.
