Las principales reivindicaciones se relacionan con el gasóleo profesional ante la subida de los precios de los carburantes, medidas que puedan acabar con el intrusismo ante la vuelta de ‘los coches pirata’ y soluciones para la aplicación del tacógrafo, aduciendo que se han impuesto multas demasiado elevadas, a las que no es posible hacer frente.
Los transportistas exigen también a la Consejería de Educación que acabe con la "incertidumbre" de los contratos, ya que se teme que se pueda iniciar una "renegociación" de los plazos, y la vuelta de algunas subvenciones que permitían financiar actividades tan necesarias como, por ejemplo, las de formación.