La fortaleza del yen y los precios altos en materias primas han marcado la primera mitad del año para el fabricante de neumáticos Bridgestone. Las ventas del fabricante han crecido tan solo dos puntos porcentuales, hasta los 15.360 millones de euros. El escaso crecimiento de las ventas de neumáticos (un 1%) es el principal responsable de la pequeña variación.
Sin embargo, pese a esta escasa variación en el volumen de negocio, los beneficios han crecido de manera importante respecto a 2011. Los 1.380 millones de euros logrados como beneficio operativo son un 43% mayores que los obtenidos en 2011, Esto se debe tanto al negocio de los neumáticos como al resto de las áreas, que pese a haber presenciado un mayor crecimiento (6% en ventas y 267% en beneficios operativos) tienen un menor peso en las cuentas del grupo. Los 776 millones de euros netos logrados suponen un 39% más que los 558 millones de beneficio neto de 2011.
Las predicciones para el siguiente semestre son aún más optimistas. La compañía pretende aumentar sus ventas un 3% respecto al año anterior, hasta los 32.347 millones de euros. El coste operativo aumentaría un 50% según estas proyecciones, y se acercaría a los 3.000 millones de euros. El resultado neto se vería incrementado en un 67% comparado con el año 2011, lo que dejaría unos beneficios de 2.970 millones de euros.
Estado financiero del grupo
La empresa nipona también ha presentado el balance de sus bienes. El total de activos de la empresa asciende a 28.800 millones de euros. El pasivo no exigible de la empresa rondaba los 12.950 millones de euros. Esto dejaba un ratio de fondos propios del 43%, un 1,3% más que en 2011.
