En términos porcentuales el retroceso fue del 4% en la red de metro con 373,5 millones de viajeros y del 4,2% en los autobuses, que transportaron a 174 millones de personas. La caída fue más pronunciada en servicios no integrados tarifariamente como el bus turístico, que tuvo un 10,2% menos de usuarios. Los transportes públicos del área metropolitana de Barcelona experimentaron, en su conjunto, la demanda fue de 626,6 millones de viajes, un 3,9% menos que en 2011. En todo el ámbito de la Autoridad del Transporte Metropolitano, la región de Barcelona, se alcanzaron 899,6 millones de validaciones, el 3,8% menos, según señala TMB.
Bajada tras un máximo histórico
2011 experimentó un récord en cuanto a usuarios del transporte público en Barcelona. Sin embargo, la caída sufrida durante 2012 ha dejado el número de usuarios a niveles de 2005, lo cual ha sido considerado una "mala noticia" por la empresa. TMB señala los que entiende son los cinco principales motivos de esta reducción de viajeros, relacionados todos ellos, en mayor o menor medida con la situación económica, factor muy correlacionado con la demanda de servicios de transporte.
El primero de los motivos señalados por TMB es el aumento del paro. Según los datos de TMB, los momentos de mayor intensidad de destrucción de empleo coinciden con las disminuciones más pronunciadas de viajeros, además un 70% del descenso de la actividad corresponde a viajes que se han dejado de hacer los días laborables en hora punta y sus respectivos trayectos de retorno. Otro factor relevante según TMB es el de la caída del consumo, que acarrea una disminución de la demanda de transporte hasta los centros de comercio.
La pérdida de población del área metropolitana, pese a no ser significativo en las estadísticas oficiales, es señalado como uno de los motivos del descenso en el número de usuarios. Las dos huelgas que paralizaron el servicio también han sido señaladas como causantes de pérdidas significativas de viajeros, además de la conflictividad "derivada de la normativa salarial estatal para el sector público, entre septiembre y noviembre tuvieron lugar 25 jornadas de alteración del servicio total o parcial a bus" señala TMB. Muy relacionado con esto se encuentra el cambio en los hábitos derivado de la inseguridad sobre la disponibilidad del servicio. Se estima que el impacto de este efecto ha tenido también cierta relación con el descenso en el número de viajeros.
