Terrón ha señalado que "continuaremos con la política de adquisición de vehículos propulsados por GNC y empezaremos a diversificar las fuentes energéticas, prestando atención al origen de dicha fuente. Por eso, comenzaremos un proceso de electrificación que pasa por la eficiencia energética, aunque centrándonos en los híbridos de gas natural como paso previo".
En cuanto a la experiencia de la empresa con vehículos propulsados por GNC, el director de Ingeniería ha explicado que las últimas incorporaciones "están funcionando aceptablemente, con los problemas lógicos de unas unidades que dan inicio a una serie. Los primeros, de Castrosua, están en operación tras un proceso de ajuste. Los segundos, de Tata Hispano, están ahora en esa fase".
Para Terrón, el rejuvenecimiento de la flota mediante la instalación de catalizadores supone que "los vehículos pueden alargar su servicio perfectamente otros dos o tres años, ya que aunque el mantenimiento de EMT ha sido, tradicionalmente, muy bueno y retirábamos los vehículos a los 10 años, hemos visto que en Europa pueden operar hasta los 14-15 años. Aún así, nuestra flota, aún sin renovación, sigue siendo la más joven de las capitales europeas".
Futuras acciones
El director de Ingeniería de la EMT de Madrid se ha referido, también, al futuro del GNC en su servicio, advirtiendo que "hay que conocer todas las posibilidades que existen para luego valorar las que mejor nos podrían encajar en nuestra política. Aunque en este momento hemos desechado el diésel apostando por el GNC, hay que estar alerta continuamente".
En cuanto a las inversiones que realizará la entidad, Terrón ha señalado que, a corto plazo, "montaremos catalizadores y reacondicionaremos esos vehículos para que las emisiones del motor vayan acorde con la estética interior". Otra novedad será el ‘dual fuel’, que utiliza simultáneamente GNC y diésel, quemándolos juntos en la cámara de combustión.
