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La Comisión Europea elabora una guía para la aplicación de la normativa sobre tiempos de conducción y descanso

La guía agilizará el proceso de armonización de la normativa en la Unión facilitando su aplicación uniforme

martes 26 de marzo de 2013, 01:00h

Según ha explicado la federación sectorial Fenadismer, la Comisión Europea  prepara una guía interpretativa para la aplicación uniforme de la normativa sobre tiempos de conducción y descanso en toda la Unión Europea. El manual facilitará la tarea a las empresas en caso de ser controlados en carretera por los agentes de inspección.

 

El comisario de Transportes europeo, Siim Kallas.
El comisario de Transportes europeo, Siim Kallas.

Las diferencias existentes en materia de interpretación de las normas de control de los tiempos de conducción y descanso en los diferentes Estados Miembros por parte de los agentes de inspección, ha motivado la preocupación del órgano ejecutivo de la Unión Europea. Las instituciones europeas han constatado, según explica Fenadismer, que los agentes encargados del control del cumplimiento de estas normas mantienen criterios de interpretación diferentes sobre las mismas cuestiones.

Por ello, desde la Unión Europea, se puso en marcha el Proyecto TRACE,  con el objetivo de lograr una mayor armonización en la inspección de los tiempos de conducción y descanso. Este proyecto TRACE ha contado con la participación activa la Unión Europea de transportistas por Carretera U.E.T.R., de la que Fenadismer forma parte.

Manual interpretativo

Este proyecto ha dado su resultado en forma de manual interpretativo sobre los criterios para la aplicación de las normas de tiempos de conducción y descanso en los diferentes países de la Unión Europea. Se establece así una guía básica para la correcta aplicación de determinados elementos fundamentales de las previsiones contenidas en el Reglamento europeo 561/2006 que sirva de base para la formación de los diferentes agentes de control de todos los países miembros. Asimismo, tratará de facilitar una mayor uniformidad en la interpretación de las normas, lo que implicará un tratamiento más justo e igualitario de todas las empresas transportistas en sus desplazamientos por la Unión Europea.