La eliminación de los peajes en los trayectos Vigo-Porriño y Teis-Chapela, así como la creación de nuevas áreas de descanso y de aparcamientos para vehículos pesados son las peticiones que ha puesto sobre la mesa la Asociación provincial de Empresarios de Transporte Discrecional de Mercancías de Pontevedra (Asetranspo) durante la reunión mantenida con el presidente de la CEP.
Comenzando con los peajes, para defender la solicitud de la supresión del existente entre Porriño y Vigo, el presidente de la asociación de transportistas ha remarcado el volumen de tráfico y el grado de siniestralidad del tramo de la A-55. En el caso del tramo urbano de la AP-9 entre Teis y Chapela, Alonso Fernández ha argumentado que es imprescindible facilitar los accesos a esas zonas industriales.
Nuevas áreas para vehículos pesados
Otra de las necesidades apuntadas es la dotación de nuevas áreas de descanso en la provincia. "Estamos hablando no sólo de aparcamientos acondicionados para grandes vehículos, sino también que cuenten con instalaciones adaptadas para facilitar el descanso de los conductores, obligatorio por la normativa de tacógrafo", ha puntualizado Alonso Fernández.
Igualmente, considera urgente que se habiliten aparcamientos para vehículos pesados, dado que en la actualidad no hay ninguno en toda la provincia de Pontevedra. "Estos espacios tendrían que estar especialmente acondicionados para camiones, es decir, dotados de todas las medidas de seguridad que garanticen la integridad del vehículo y de las mercancías. De esta manera se contribuiría a atajar el actual problema de robos diarios de combustible, mercancías y sabotajes en los vehículos", ha subrayado el presidente de Asetranspo.
Además, Alonso Fernández ha planteado a Luís Novoa que es preciso insistir en la supresión definitiva del céntimo sanitario para el transporte de mercancías. En las áreas urbanas, existe carencia de áreas de carga y descarga, lo cual dificulta el reparto de las mercancías, según ha añadido el presidente.
Por otro lado, el intrusismo también preocupa mucho a los transportistas, quienes solicitan la máxima colaboración y control por parte de las autoridades competentes, a las que exhortan a combatir el cabotaje irregular de transportistas portugueses, además de velar por el cumplimiento de la normativa fiscal y laboral.
