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La Policía Municipal de Madrid y la DGT controlan el peso de la carga en camiones de transporte que transitan por la ciudad

Desde el Ayuntamiento recuerdan que el sobrepeso de los vehículos de reparto es peligroso y daña la calzada

miércoles 23 de abril de 2014, 02:00h

Los agentes municipales están colaborando con la DGT en una campaña de control para evitar el sobrepeso en las cargas y verificar la idoneidad de los vehículos que llevan alimentos perecederos por la capital. Superar en más del 100% el peso máximo autorizado o transportar alimentos frescos en vehículos inadecuados son las infracciones más graves.

Superar en más del 100% el peso máximo autorizado o transportar alimentos frescos en vehículos inadecuados son las infracciones más graves. Foto Ayuntamiento de Madrid.
Superar en más del 100% el peso máximo autorizado o transportar alimentos frescos en vehículos inadecuados son las infracciones más graves. Foto Ayuntamiento de Madrid.

El Ayuntamiento de Madrid informó la semana pasada de que la Policía Municipal y la DGT siguen colaborando en el control de la carga en camiones de distribución que circulan por la ciudad. La Unidad Especial de Trafico de la Policía Municipal de Madrid regula a diario la circulación de camiones y furgonetas en puntos clave de la capital como Mercamadrid o el Centro de Carga Aérea del Aeropuerto de Barajas. Los agentes, que trabajan en estrecha colaboración con la Dirección General de Tráfico (DGT), controlan los vehículos de transporte de escombros, estructuras, alimentación y chatarra, entre otros.

La unidad de la Policía Municipal se encarga de vigilar la aptitud de los vehículos para las tareas que desempeñan en zonas de gran afluencia. Según el Ayuntamiento, en la campaña de febrero de 2013 los agentes inspeccionaron 2.055 vehículos de los cuales 735 presentaron irregularidades. Las más habituales tienen que ver con la velocidad, deficiencias técnicas del vehículo, peso y documentación.

Peso y tipo de carga inadecuados

Las infracciones más graves son las que se dan por transportar alimentos perecederos en vehículos que no cumplen con el acondicionamiento necesario para ello o superar en más del 100% el peso máximo autorizado. Según el Ayuntamiento, este tipo de inspecciones rutinarias pretender garantizar "la salud pública y la seguridad" en la capital; así como el consiguiente deterioro de calzadas, aceras, adoquines y alcantarillado debido al peso excesivo de los vehículos.

La influencia de la carga es uno de los factores que más afecta en la siniestralidad de estos vehículos, ya que modifica sus condiciones de conducción y sus características. Policía Municipal cuenta con básculas portátiles con dispositivos de control de sobrepeso en zonas de gran afluencia de este tipo de transportes.

Es habitual encontrar las básculas portátiles en zonas del centro de Madrid como la Puerta del Sol, donde los agentes montan un circuito en el que, aparte del peso, un equipo de policías especializados en materia de transporte, comprueba la documentación y los permisos necesarios para el tipo de mercancías trasladadas.