Konecranes ha lanzado Boxhunter, reinventando así la grúa RTG. La innovación que salta a la vista es que el operario está situado a nivel del suelo, ya que se ha bajado la cabina a la línea de camiones, el corazón de la acción del manejo de contenedores. Además, Boxhunter ofrece un planteamiento nuevo del funcionamiento de la RTG y de la ergonomía del operario.
Boxhunter es el resultado de un intenso esfuerzo en el desarrollo de productos que ha reinventado la grúa pórtico sobre neumáticos (RTG). El concepto operativo de la grúa se basa en una avanzada tecnología láser y de vídeo que Konecranes ha desarrollado para sus grúas para apilado automatizado (ASC). Las videocámaras colocadas en puntos estratégicos en toda la grúa y una sofisticada interfaz gráfica de usuario en la cabina ofrecen al operario una excelente visibilidad de todas las zonas donde necesita tenerla.
Además, Boxhunter está fabricada teniendo en cuenta las necesidades de los operarios de las terminales de contenedores que quieren lo mejor pero que no necesitan todas las características o el rendimiento óptimo de la RTG de 16 ruedas superior de la gama de Konecranes. Así, BOXHUNTER mantiene un nivel constante de rendimiento, aproximadamente +15 movimientos de contenedor en una hora, ofreciendo al mismo tiempo una alta fiabilidad y el mínimo tiempo de parada, algo que es uno de los principales aspectos de la filosofía y de la marca de Konecranes.
La nueva Boxhunter está construida en torno al operario y la interfaz gráfica de usuario con la que éste trabaja. La idea principal es girar las cosas sobre su cabeza literalmente y bajar al operario al nivel del suelo. Además, al bajar la cabina, la maquinaria de elevación también se ha reubicado a nivel del suelo. Esto simplifica la estructura general y supone un acceso más fácil a esta maquinaria, una característica idónea desde la perspectiva de servicio.
