www.nexotrans.com

Las empresas aplican la logística sostenible por una cuestión de imagen corporativa, concluye un estudio de Kaleido

Todavía se está muy lejos de que el componente ambiental influya sobre los procesos logísticos

sábado 19 de julio de 2014, 02:00h

Una de las razones más importantes por las que las empresas apuestan por aplicar una logística sostenible es por temas de imagen corporativa. Esta es una de las conclusiones del informe anual de logística editado por KALEIDO. IDEAS & LOGISTICS, que analiza la logística desde un punto de vista del compromiso medioambiental.

Presentación del informe anual de logística de KALEIDO. IDEAS & LOGISTICS.
Presentación del informe anual de logística de KALEIDO. IDEAS & LOGISTICS.

El informe también apunta a que el sector de las energías renovables es el más avanzado en la aplicación de Green Logistics, seguido de las empresas que se dedican a los recursos naturales, la automoción y la alimentación. Como señaló Xoán Martínez, director general de Kaleido, “la logística va a vivir en los próximos años una creciente presión para el control del gasto energético y de sus emisiones contaminantes, sin embargo estamos muy lejos de que el componente ambiental o de sostenibilidad pueda influir sobre la forma en la que realizamos nuestros procesos logísticos”.

Asimismo, aseguró que “las tendencias de futuro en cuanto a logística sostenible pasan por desarrollar entornos colaborativos, cuestionarse los modelos de producción y distribución existentes y buscar un índice de sostenibilidad logística”. Por su parte, el Presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Ignacio López-Chaves, destacó la necesidad de apostar por el desarrollo de tecnologías eco-eficientes y soluciones de organización de procesos más sostenibles que supongan una mayor eficiencia en la producción y una minorización de los consumos energéticos, de las emisiones atmosféricas y, por tanto, de la huella de carbono asociada a los procesos y operaciones.

En este sentido, avanzó que la huella de carbono de la Autoridad Portuaria de Vigo se ha reducido en los últimos años 2 años en más de un 30% respecto al movimiento de mercancía, fruto de la política de la Autoridad Portuaria de reducción de consumo de recursos y mejora de la eficiencia energética. Asimismo, recordó que, en el caso concreto del Puerto de Vigo, se están llevando a cabo iniciativas de gran envergadura como el PROYECTO TEFLES, orientado a la reducción de las emisiones en el atraque a puerto, o el proyecto GREEN PORT ENERGY CENTER (GPEC), que se centra en el empleo de gas licuado para la producción de energía eléctrica, aire caliente y aire frío destinado al suministro a buques en puerto.

Falta de consenso

La legislación ambiental tiende a ser cada vez más exigente en relación a la medición de emisiones, lo que hoy es una estrategia de diferenciación, mañana será un requisito indispensable. Sin embargo, el sector del transporte es un sector difuso, no sometido a control de derechos de emisión, con un objetivo de cara a 2020 de reducción del 10% de emisiones con respecto al 2005. Según la Agencia Europea del Medio Ambiente, el transporte representa un tercio del consumo de energía final de los países miembros y más de un quinto de las emisiones de gases de efecto invernadero.

El informe muestra cómo existen numerosas metodologías de reporting y cálculo de emisiones, cada una con un nivel de incertidumbre y un alcance determinado lo que constituye un verdadero problema. Para la mayoría de las compañías logísticas, el 90% de sus emisiones están localizadas dentro del alcance tres, considerado voluntario. Por lo tanto, el nivel de incertidumbre de la medición es de vital importancia para obtener un resultado fiable y no una herramienta de marketing.

Como apunta Nicolás Troncoso, director de I+D+i de Kaleido, “más allá de la medición de emisiones, para poder hablar de logística sostenible o de Green Logistics, habría que tener herramientas que permitan poder valorar entre una logística clásica y una opción Green. Esto sólo se conseguiría estableciendo un índice de sostenibilidad logística, que permita al cliente valorar y decidirse entre diferentes opciones logísticas”.